viernes, 24 de diciembre de 2010

NAVIDAD DE 2011


La nostalgia y la dulce añoranza del pasado nos invaden estas fiestas Los recuerdos  de los seres queridos que ya no están entre nosotros, a quienes tanto quisimos, cuya memoria forma parte indisoluble de nuestro ser. ¿Qué estariamos dispuestos a dar para poder besarlos de nuevo? ¡Cuántas cosas quedaron por decirles…!, Si hay un Dios tras de ese universo helado de la materia, y podemos volver a verles cuando, también nosotros hayamos abandonado este mundo, y sean nuestros hijos quienes nos rindan el tributo de su amoroso recuerdo,  cómo será esta experiencia más allá del tiempo, del espacio y de la materia, bajo la cual los conocimos y que ahora nos resulta imposible separar de su querida ausencia.?

¡Que callen las palabras y hable la música!. ‘¡Que sea el inefable Bach,, tocado por la mano de la Divina Providencia, quien nos conmueva con el lenguaje de la música allende los  conceptos, inseparables de la palabra!

Dos partes del Weichnachtoratorium que me resultan particularmente queridas pues en ellas se une  el espíritu en su mas alta expresión, junto a la expresividad, fraseo inigualable y dulce belleza,  tan femenina, espiritual y carnal a la vez, de las bellísimas  Angelika Kirsshlager y Bernarda Fink.

Que hable Juan Sebastián. ¡Va por ti querido papá! . ¡Va por ti, madre adorada. y por vosotras mujeres amadas en cada etapa de mi vida,  que me habeis dado en la tierra, lo mas cercano al cielo, con vuestro cuerpo y  alma cercanos y lejanos, presentes y ausentes, para siempre indelebles en el fondo del alma del niño y joven que fui y del hombre que soy.!